8.11.2008

LO QUE CONTAMINA AL HOMBRE

“LO QUE CONTAMINA AL HOMBRE”

MUCHAS PERSONAS, TRATAN DE CUESTIONAR A OTRAS, Y MAS SI ESTAS LE SIRVEN A DIOS. EN UNA OPORTUNIDAD GENTE RELIGIOSAS TRATABAN DE INCOMODAR A NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO A QUIEN MOLESTABAN A CADA MOMENTO, PUES EL NO ERA COMO ELLOS NI ANDABA CON ELLOS PUES SABIA QUE SU CORAZÓN, ESTABA LLENO DE MALDAD Y LO QUE HACÍAN ERA PARA QUEDAR BIEN CON LA GENTE Y NO PORQUE QUERÍAN AGRADAR A DIOS.

LA RESPUESTA A ESTAS PERSONAS FUE LO SIGUIENTE:

Pero decía, que lo que del hombre sale, eso contamina al hombre. Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios, los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la soberbia la insensatez. Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre. Marcos 7:20 al 23

Muchas personas quieren poner en un limite religioso a otras cuando el Señor vino para darnos vida y vida en abundancia, y nos dio libertad, pues a quien el hijo lo libertare verdaderamente Será libre. Y esto lo decimos por personas que sabiendo o ignorando tratan de espiar y de acusar a los hijos de Dios, para sacar provecho personales y obtener las cosas que lo demás se la han ganado honestamente y trabajando duro, pero para esas personas la calumnia la envidia y el mal obrar como tirar traquitraqui y molestar a los demás, porque ellos son los verdaderos y los demás son los falsos, imagínense que al señor Jesucristo le decían demonio porque expulsaba demonios y ellos si se justifican diciendo que son los verdaderos cuando por sus actitudes demuestran lo contrario. Por eso las sagradas escrituras dicen lo siguiente:
“Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; Pero Jehová pesa los corazones.”
PROV.21:2
no podemos juzgar a los demás, si nuestras intensiones no son honestas y sinceras delante de Dios.

Debemos recordar siempre amados hermanos que la contaminación no proviene de afuera, sino de adentro, del corazón por eso no molestemos mas a los demás, sino mas bien busquemos siempre el hacer el bien y abrir los ojos a quienes anden en oscuridad, y seamos hijos de luz en vez de ser hijos de las tinieblas, y pidamos al señor siempre lo que David le pedía a Dios:

” Crea en mí, OH Dios, un corazón limpio ,Y renueva un espíritu recto dentro de mí.”

Salmo 51:10

Dos cosas importante, pues un corazón limpio de tanta basura y sobre todo de resentimientos que solo dañan las vidas de las personas, amargándolas y frustrándolas en todas las cosas que ellas emprendan y un espíritu recto dentro de nosotros, un espíritu que nos llene de los frutos para poder dejar de corretear las casas de los demás y de espiar y maltratar al prójimo con la lengua, dejemos que el espíritu santo pueda transformar nuestras vidas a la imagen y semejanza de Dios. Pues no en vano se nos enseñaron estas escrituras:

Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia; vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. Pero el que no tiene estas cosas tiene la vista muy corta; es ciego, habiendo olvidado la purificación de sus antiguos pecados.

2 de Pedro: 1: 3 al 9

Giancarlo Pellegrino