11.10.2008

SIETE VECES EN EL JORDAN

RÍO JORDÁN, ISRAEL

Dios les bendiga, gracias por el contacto, bendiciones para todos, hoy con una reflexión acerca del río Jordán, importante en Israel, no solo por su recorrido y afluencia hidrográfica, sino por los acontecimientos que el ocurrieron, como cuando Josúe, abrió en dos el río y pasaron en seco, cuando el Señor Jesucristo fue bautizado por Juan el bautista y allí se escucho la voz del cielo, este es Mi Hijo en el cual tengo complacencia, y al mismo tiempo decendia una paloma, que representaba el Espíritu Santo que se posaba sobre nuestro Señor, pero también allí fue sanado Naamán, aquel general que estaba enfermo y que al escuchar el consejo de una joven hebrea de ir a Israel para que el profeta le orara y pudiera quedar sano de su enfermedad.

Pero hay algunas, enseñanzas que quiero que meditemos en ella, pues pueden ser de bendicion para nuestras vidas, el pasaje de 2 de Reyes 5 del 1 al 27, usted lo lee en su biblia, nos podemos dar cuenta de que Naamán que significa Valeroso, era un hombre de fe, importante pues luchaba con gran valentia para los ejercitos del rey de Siria, pero tenia lepra, estaba enfermo sin embargo al escuchar el testimonio de una joven hebrea que trabajaba en la casa, le dijo a su esposa de que si le pedia al profeta que estaba en Israel, era Eliseo, la enfermedad se le quitaria.

Cuando este escucho de su esposa lo que la esclava judia le habia contado del profeta, fue inmediatamente a pedir permiso al presidente (rey de Siria), para que lo dejara ir a Israel.

Primera Enseñanza: "TESTIFICA QUE EN JESUCRISTO HAY SANIDAD"

La joven a pesar de que era esclava, no tubo temor de testificar que en Israel habían hombres de Dios, Profetas que podían sanar su enfermedad, hoy con toda la libertad gracias a Dios que tenemos en muchos países, pues hay algunos que no permiten de testificar de Cristo, pero esta joven tuvo el valor de hacerlo, sabia que no quedaría avergonzada, y que su amo vería la gloria de Dios, Amor por Cristo y por sus amos, que falta hace hoy esa palabra a tanta gente que esta en oscuridad que se le dice crudamente no tienes mas vida o te queda poco tiempo de vida, que falta hace que personas puedan decirles en Jesucristo hay esperanza, animese mi hermano(a), a ser valiente como esta joven hebrea, diga a las personas que hay una iglesia que como en tiempos de Eliseo, pueden orar y clamar a Dios para la sanidad de sus cuerpos y almas, Porque por sus llagas fuimos nosotros curados, animese hermanos no tenga miedo pues Dios no nos va a vergonzar, sino que se glorificará para gloria de su nombre.

Ahora bien, Naamán creyó al mensaje, era hombre de fe, aunque fue probado para doblegar su orgullo, pero veamos primero que cuando el rey de siria envía cartas al rey de Israel este, que no tenia visión de Dios, sino que siempre abundaba con una mente atada por la incredulidad y el miedo le dice que si el era Dios para sanar a ese hombre, y que lo que queria el rey de siria era buscar pelea. Pero gracias a Dios Elíseo escuchó lo que dijo el rey y lo reprendió, ¿Por qué has rasgado tus vestidos?, venga a mi ahora y sabrá que hay profetas en Israel.

Segunda Enseñanza: QUITA EL OBSTÁCULO DE LA INCREDULIDAD

Naamán había creído, el rey de siria, también, pero el rey de Israel, tenia su corazón lleno de incredulidad, y su mente atada a la guerra, a la pelea, a la discordia a la desconfianza, cuando lo que Dios quería era derramar su gloria sobre los sirios y darse a conocer como el Dios de todas las naciones. La incredulidad es el gran mal de la humanidad, las personas les cuesta mas crer en tantas cosas, y no en el Dios verdadero, en el Dios que es real y para el nada hay imposible, que es el Dios de toda carne, El Mismo Señor dijo: "muchos leprosos habían en Israel en tiempos de profeta Elíseo, y solo fue sanado Naamán el Sirio" La incredulidad es lo que no deja fluir la bendición de Dios a nuestras vidas, es la que no nos deja que venga la sanidad, ni la salvación de nuestras almas, porque le creemos mas a la mentira que a la verdad, Dios nos ayude a quitar los obstáculos de la duda, y pueda germinar la fe en nuestros corazones.

seguiré mañana...

GIANCARLO PELLEGRINO